Hacemos modelos digitales, mediante un escaner que va pasando por las arcadas y lo convierte en un archivo 3D en STL, esto en caso de querer hacer algún tipo de prótesis, se va directamente por e-mail al laboratorio con lo cual la velocidad de transmisión de datos es mucho más rápida además de precisa.
En el laboratorio con un software de diseño, confecciona las prótesis y las manda a un centro de fresado para imprimir nuestros trabajos.
El STL también nos vale a nosotros para hacer diseños de sonrisa, cómo le gustaría que le quedaran los dientes al paciente, además de la tan famosa ortodoncia invisible, que son cómo una funda de tus dientes en las que se le van introduciendo pequeños cambios para ir moviendo paulatinamente los dientes mes a mes.

Para estudiar un paciente sin tenerlo a él presente, se toma un modelo de su boca, esto se hace con una pasta que se llama alginato o silicona y se positiva en escayola para conseguir una impresión dental completa de escayola. La realización de alguna fotografía era necesaria para poder analizar parámetros faciales, además de intraorales, sonrisa, simetría, línea media, etc. y en muchos casos radiografías que hasta ahora eran en 2D.